Todas sabemos que lo de desear tener el pelo de otra forma es la tónica general. Si lo tenemos rizado, nos encantaría tenerlo liso. Si lo tenemos muy liso, nos gustaría tenerlo ondulado o rizado. ¡Siempre a contracorriente con nuestro pelo!

Hoy nos vamos a centrar en aquellas que tengan el pelo liso y lacio, se lo quieran rizar y que suelen tener problemas. Todo es muy bonito hasta que nos tiramos un buen rato con el rizador y, a la media hora, ya no hay rizos o bucles y se nos ha vuelto a alisar el pelo. Vamos a seguir los trucos que nos da Nastasia Grace en este vídeo:

Primero, tienes que preparar tu pelo con un buen champú y acondicionador que dote de volumen tu pelo liso.
Después de lavarlo, cuando aún lo tienes seco, es importante protegerte el pelo, ya que le vas a dar luego un buen tute aplicando calor.
Acto seguido, es aconsejable utilizar un tratamiento que se base en aceite de macadamia o aceite de argán. Ella recomienda el de macadamia porque no deja residuo oleoso, ideal si tienes el pelo con tendencia a ser graso.
Además, ella, antes de secar el pelo, se aplica una mousse o espuma para darle volumen.
Es el momento se secarse el pelo, mejor si lo haces de abajo a arriba, con la cabeza boca abajo, para dotarlo de más volumen. Una vez seco, con el peine, se hace hincapié en las raíces, subiendo el pelo hacia arriba, siempre con el mismo objetivo de agregar volumen a tu pelo liso y lacio.
También es muy recomendable utilizar algo de «dry shampoo» o champú en seco, ya que le da consistencia a tu cabello y será más fácil que el rizo se mantenga con memoria, aunque ella no lo utiliza en este vídeo.
Sí que se vuelve a aplicar, sin embargo, el protector de calor y se cepilla el pelo para esparcirlo.
Ahora es el momento clave, el de sacar el rizador de pelo. Mejor si es uno en forma cónica, como el que ella usa. No tengas miedo en rizar mucho el pelo como si fueses Carmela Soprano, ya que con el tiempo éste va a perder fuerza en el bucle y va a tender a alisarse. Cuando acabes de rizarlo, es super importante poner una buena capa de laca para fijar el rizo.
El penúltimo paso, que es opcional, es peinar los rizos para darle un aspecto más natural y desenfadado. El último es cardar un poco la zona de las raíces y poner laca otra vez para fijar el volumen. También es opcional volver a la rizadora para retocar aquellos rizos que hayan perdido su forma.
Esperamos que, siguiendo estos consejos, consigas rizar tu pelo y que te dure el máximo de tiempo posible.